domingo, 27 de marzo de 2011

Los textos de autor y los álbumes de imágenes

En este segundo bloque vamos a estudiar los textos de autor y los álbumes de imágenes. Para ello tendremos que saber que quieren decir esos dos conceptos.
Un texto de autor es aquello que está escrito por alguien. Algo que ha fijado por escrito una persona y que ha sido su autoría. Es creación propia del autor. Aunque sean anónimas o pseudónimo tienen su copyright y no se pueden copiar.

Un álbum de imágenes es un libro normalmente narrativo (cuenta una historia) en los que las ilustración tiene tanto componente artístico como el texto. Se creó como apoyo visual para apoyar al texto y se empezó a usar en los años 90.
Por lo tanto, podemos deducir que los álbumes de imágenes tienen dos manifestaciones artísticas: literarias e ilustración.



En los álbumes ilustrados de los niños algunas veces no aparece texto, por lo que la narración se sigue a través de las imágenes. El niño puede seguir la historia a través de la secuencia de imágenes.

Estos álbumes ilustrados en los que sólo hay imágenes son muy útiles para los niños prelectores ya que pueden seguir la historia sin necesidad de saber leer. También, aunque haya texto y el niño no sepa leer puede seguir la historia si le hemos leído el cuento al menos una vez.

Estos se crean porque el autor quiere hacer algo artístico, una obra de arte con las imágenes para que el niño se acerque además de a la literatura, al arte.



Los primeros álbumes ilustrados que se hicieron fueron para niños prelectores. Las primeras editoriales fueron Kalandraca y Kokino.








Hasta el S.XX no había literatura infantil. Hasta ese siglo no se tenía en cuenta la literatura infantil sino una literatura didáctica por su objetivo. Los libros se hacían para educar y meter conocimientos morales y no estaban hechos para que los niños se divirtieran. Estaban hechos para enseñarles a los niños los conocimientos que los adultos querían.

A finales del S.XIX principios del XX, se crearon los cuentos de Calleja. Estos cuentos no llegaron a los pueblos ya que la mayoría de la población era analfabeta.

Calleja empezó a editar libros para niños mayores que, en teoría, eran didácticos para introducir el método lecto-escritura. Calleja solo fue editor, no escritor. Estos cuentos estaban en blanco y negro.

No se habla de niños de infantil hasta los años 90.

Este hombre quiso vender libros muy baratos y, para ello, publicó libros pequeñitos y con pocas páginas para que los niños pudieran comprarlo. Este librito les costaba lo mismo que una chuche.

Cada semana publicaba uno. Estos cuentos, al igual que los libros, tenían que enseñar. Calleja contrataba a personas para que le escribieran y poder publicar todas las semanas. El nombre de autor no aparece porque él pagaba “en negro” y no le convenía hacerlo.
En la última hoja siempre aparecía un personaje relevante para que los niños aprendieran más cosas.

Calleja no solo editó libros pequeños sino que también editó libros juveniles. Estas ediciones estaban destinadas a la gente rica.
Calleja vio que se podía reducir el coste reduciendo el tamaño, la calidad de las páginas, etc, y se amplió el mercado. El planteamiento de Calleja era que la literatura infantil fuera educativa, moralizante y didáctica, es decir, que sirviera para enseñar y para que los niños fueran mejores personas.

Existen dos tipos de libros:

·     -Aquellos que simulan ser cuentos folclóricos y están ambientados en tiempos remotos.

·     -Aquellos que simulan ser realistas. Los niños se identifican con sus personajes ya que hacen lo mismo que ellos. Lo único realista que hay es la ambientación.

Los personajes infantiles que aparecen en los cuentos de Calleja son personajes planos. Un personaje plano es aquel que se define por una o dos características, no evoluciona. Solamente evoluciona cuando le ocurre algo horrible. Lo contrario de un personaje plano es un personaje con psicología.




También la editorial “Bruguera” publicó unos libros pequeños pero más grandes que los anteriores (años 50). Son como cuentos de bolsillo para niños y siguen siendo didácticos. Estos libros ya estaban en color.

La editorial “Molino” también hizo lo mismo.

Después de que aparecieran los cuentos de Calleja en 1928, Elena Fortún publicó una novela llamada “Celia y sus amigos”. Se consideró una forma muy diferente de hacer literatura infantil ya que la literatura didáctica desaparece para divertirse en el S.XX. Elena pintó en el libro a una niña de verdad que reflejaba la psicología de los personajes en la literatura infantil.

Celia fue el primer personaje de la literatura infantil que fue creciendo al mismo tiempo que los niños que lo leían.

Le achacaron a Elena Fortún que sus libros estaban destinados a las niñas, entonces creó al hermano de Celia para que también lo leyeran los niños.
Cuando Elena Fortún murió, sus descendientes se encontraron con un manuscrito y lo publicaron. Se llamó “Celia en la Revolución”. En este libro hay partes que se corresponden con la vida de Elena Fortún.

Otro escritor importante es Salvador Bartolozzi, el cuál es una especie de artista interdisciplinar. Empezó haciendo un espectáculo de marionetas para niños en el Teatro Eslava. El primer éxito fue “Pinocho y Chapete” y “Pipo y Pipa”. Bartolozzi creó un cuento aprovechando el éxito que estaban teniendo estos personajes.


Antes de existir la televisión, lo que la gente usaba para entretenerse era la radio y había seriales radiofónicos. Salió un libro para niños llamado “Matilde, perico y periquito”. También aparecieron los libros de la “Tomasica”. El cuento más famoso fue “Antoñita la fantástica”.

La primera vez que se convocó un premio literario se le concedió a José María Sánchez Silva, autor de “Marcelino pan y vino”. Marcelino era un niño real que vivía en un convento enorme de piedra, con animales y los frailes estaban encantados con él. Marcelino hablaba con el Cristo crucificado que había en el desván.
En este libro aparece el tema del amigo invisible. Es muy común que los niños tengan un amigo invisible por lo que algunos se sentirán identificados con Marcelino. En esta época estaban muy de moda los finales dramáticos.

Jean Dbrunhoff fue el primero que se preocupó por los niños prelectores e  introdujo un personaje para niños de infantil llamado “Babar” (elefante).


Se produce un cambio en los tres géneros literarios:

TEATRO

Por una parte hay que distinguir el texto teatral (literatura) y por otro el espectáculo.
No existen libros de teatro infantil para niños menores de 8 años ya que el niño no entiende la estructura del texto dramático. Para las personas que tienen que leer los cuentos a los niños que todavía no saben leer, les es más fácil que el cuento esté redactado en prosa o en verso.
Existen libros en los que nos explican las bases para realizar una obra de teatro para/con niños pero estos libros no son literatura infantil.

POESIA

La poesía se define por tres aspectos:

·     -Su estructuración en versos.

·     -Tiene como objetivo expresar sentimientos.

·     -De los tres géneros literarios es la que tiene un mayor grado de función poética. La función poética la marcan las figuras literarias y pueden referirse al contenido y a la forma.

La rima y el ritmo se dejaron de usar en la Generación del 27.
La poesía infantil suele ser poesía épica y no expresa sentimientos.

La poesía infantil tiene una heroína llamada Gloria Fuertes. En los años 50 escribía poemas de amor pero había un problema y es que en esa época la gente no leía poesía. Gloria decía que a los niños no se les educaba para que entendieran la poesía. Todos los temas de la poesía estaban escritos desde una perspectiva adulta.
Gloria encontró otros referentes de otra poesía infantil en otros países: Inglaterra, como los “Nursery Rhymes” que son textos cortos de 4 o 5 versos con historias absurdas pero que a los niños les encantaba. Cuando Gloria vio este tema enmarcado en lo absurdo, cambió completamente y empezó a escribir una poesía diferente. Fue muy querida por los niños.


Por lo tanto, ella hizo reflexionar a los demás autores de poesía infantil sobre la forma de escribir para estos niños, lo que supuso un gran cambio. Fue la que más apareció en los libros de texto de la ley de los 70 e incluso en la LOE hasta hoy en día. Después de morir se siguen utilizando en los libros de texto.

Gloria empezó a escribir poemas de carácter amoroso y como le gustaban mucho los niños también escribió cuentos infantiles.
Pasó de escribir cuentos infantiles a poemas infantiles y no le gustaba nada que la llamaran “poetisa” ya que prefería que la llamaran poeta.

Por lo tanto, fue y sigue siendo “la poeta de los niños”. Hubo poetas que intentaron copiar la poesía de Gloria Fuertes pero que no triunfaron tanto como las de ella.

Actualmente no hay autores que se interesen por escribir poemas para niños. Hay poemas que por ser fáciles de leer o por ser cortitos los meten como libros o poesía para niños, pero no han sido escritos para ellos. El único que escribió poemas para ellos fue Lorca, quién escribía poemas para sus sobrinos cuando se reunían en familia, como “El lagarto y la lagarta”. Estos más tarde se han publicado pero no como poesía infantil sino como lo escrito por Lorca.

En Educación Infantil lo únicos libros que nos podemos encontrar de poesía actualmente son los de Gloria Fuertes de la edición “Escuelas españolas”. Los dibujos son poco atractivos para lo que están acostumbrados los niños de hoy a pesar de los años que tienen.

El cuento “Un bicho extraño” tiene como principal objetivo que el niño se divierta, aunque también se trabaja la figura corporal pero como objetivos secundarios. Sin embargo, existen otros libros para enseñar algo más determinado como “Teo y el otoño”.

PROSA

En la segunda mitad del S.XX los autores se empiezan a preocupar por hacer literatura para que disfruten los niños. De repente, empiezan a surgir libros donde los autores conocen a los niños, la psicología del niño, es decir, que si van a escribir para un niño de 4-5 años deben conocerlo, y si escriben una historia pues que el niño se pueda identificar con el personaje al ser éste real.

Mercedes Gómez del Manzano era una investigadora que escribió un libro entre las relaciones de un niño protagonista y el niño lector, en la literatura del S.XX.
Explica muy bien la evolución de los personajes (desde los de Calleja hasta los de los años 30) a partir de muchos libros: cómo pasa de un niño sumiso a un niño rebelde hasta uno real.
Gracias a todos estos cambios el niño ya puede identificarse con el personaje.

Lo que hay que buscar es que el niño lector se identifique con el niño protagonista. Aunque el protagonista sea un oso también se puede identificar con él, por ejemplo porque no le gusta irse a dormir.
El niño de infantil tiene dos características:

·     -El animismo: personifica los animales y los objetos.

·     -El sincretismo o pensamiento sincrético: no separa las partes, lo ve como un todo.

Es fundamental saber en qué momento están los niños para saber qué tipo de cuentos es adecuado para esa edad. Hay que tener en cuenta la psicología evolutiva.
La psicología del niño lector y protagonista es paralela en cuanto a intereses (van cambiando, no son estáticos), vocabulario (lenguaje), contexto y psicología.

El personaje infantil de los años 60 y 90 ya no presenta a un niño plano. El niño plano se define por dos características: BUENAS y MALAS. Si es malo (mentiroso) puede escarmentar y volverse bueno (no volver a mentir, decir siempre la verdad); o puede ser malo y pasarle unas cosas horribles (ir al infierno, salirle sapos y culebras por la boca).
Cuando los niños tenían actitudes buenas (generosos) nunca se volvían malos y la vida les premiaba por serlo.

A partir de los años 60 poco a poco se va llegando al niño real. Un niño no sabe enfocar bien sus sentimientos y emociones.
En la literatura actual ya no hay actitudes buenas y malas, sino que el niño tiene valores positivos y negativos. El niño que empieza la historia en el lado de los valores positivos se mantiene ahí durante toda la historia. Los valores negativos no son malos, simplemente hacen que no seas tan feliz.

De momento esto es todo. Necesito tomar un respiro :) Hasta pronto!!


miércoles, 16 de marzo de 2011

¿Cómo analizamos un libro infantil?


Para saber si un libro es adecuado para Educación Infantil hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:

1º Tenemos que decidir para que edad es. Para averiguarlo nos fijaremos en el protagonista y en el tema.
2º Temas que aparecen en el cuento.
3º Qué intenta transmitir el emisor al niño.
4º El tipo de estructura.
5º Tiempo y espacio en los que se desarrolla la historia.
6º Cómo son las ilustraciones.
7º El lenguaje que emplea.
8º Los valores y contravalores que transmite.

A modo de ejemplo, entre todos analizamos el libro “Adivina cuánto te quiero”.
Ahora voy a analizar el libro “Orejas de mariposa” siguiendo los puntos anteriores.

Autor de texto: Luisa Aguilar
Autor de las ilustraciones: André Neves
Editorial: Kalandraca
Año: 2008
Este libro va dirigido a niños mayores de 3 años ya que el tema de lo absurdo y de los complejos puede aparecer a esa edad.
El emisor, es decir, el protagonista es una niña llamada Mara. A pesar de sus complejos, en general, y de sus orejas grandes, en particular, ella sabe actuar con picardía y no deja que le afecte lo que digan de ella.

Aparecen dos temas principales: la picardía y los complejos. Mara tiene mucha picardía y sabe responder a sus compañeros cuando se meten con ella por sus complejos. También aparece como tema secundario lo absurdo. Mara responde de forma absurda, por ejemplo, dice que su vestido es un gran tablero de ajedrez, o que puede llegar a abrazar la luna por su altura.

La estructura está formada por planteamiento, nudo y desenlace, siendo el nudo acumulativo ya que se repite continuamente la misma acción.

El tiempo y el espacio son indefinidos ya que en ningún momento se sabe donde y cuando transcurre la acción.

Las ilustraciones son artísticas, no son estereotipadas. Están secuenciadas ya que el niño puede seguir la historia a través de las ilustraciones cuando se lo hemos leído al menos una vez.

El lenguaje es sencillo aunque aparecen algunas palabras que quizás el niño no conozca. Ej: revolotean, gacela, rugen, larguirucha.

En cuanto a los valores, no aparece ningún valor negativo, son todos positivos. Mara empieza en el lado positivo y termina en el mismo lado. Al principio Mara está acomplejada por sus orejas grandes pero su madre le dice que son orejas de mariposa, entonces Mara enseguida empieza a ver las cosas por el lado positivo.

En mi opinión, este cuento es de gran ayuda para aquellos niños que siendo muy pequeños empiezan a tener complejos y no se gustan a ellos mismos. Necesitan ver las cosas por el lado positivo y no dejar que pequeños detalles, como llevar gafas, les haga infelices.







martes, 8 de marzo de 2011

Y yo que creía saber lo que es la literatura... que equivocada estaba (corregido)

Antes de seguir mi camino por el fantástico mundo de la literatura infantil, vuelvo a publicar los apuntes del Bloque 1 ya que hay conceptos que no tenía muy claros. Por lo tanto, espero haber corregido estos errores y si aún así vuelvo a tener algún fallito pues eso que me llevo ¿no? Porque como ya sabéis de los errores se aprende :)

Empezamos pisando fuerte: definiendo la palabra literatura. Cada uno de nosotros hemos escrito lo que pensábamos que sería la literatura pero ninguno hemos acertado plenamente. Todas esas definiciones las hemos clasificado en tres términos:

Literatura = ARTE
Historia de la literatura = CORPUS
Teoría de la literatura = DISCIPLINA

En el S.XVIII la literatura se definió como el arte de la palabra escrita pero a partir del S.XX pasó a denominarse arte de la palabra, dando importancia a la transmisión oral.
Por lo tanto, podemos decir que la literatura tiene las siguientes características:

-Es un Arte de la palabra ya que tiene una intencionalidad artística.
-Emplea la función expresiva y poética para crear una reacción en el espectador.
-Su contenido es ficción. Aunque una obra esté basada en hechos reales el autor siempre añade un toque ficticio.

Un ejemplo de literatura es “Los pilares de la tierra”. Esta novela es realista ya que sucede en lugares reales pero la historia es inventada, es ficticia.

La literatura se puede confundir con la paraliteratura pero ésta última no tiene el toque de ficción que caracteriza a la literatura. Por ejemplo, una biografía no sería literatura ya que su contenido no es ficticio. ¡¡Recordar!! No tiene ficción = no es literatura.
Otro ejemplo más, un documental también es paraliteratura ya que su contenido no es ficticio.

Umberto Eco trata la disciplina denominada semiótica, en la que analiza todo tipo de señales, iconos, signos, y su estructura. En su obra “Apocalípticos e integrados” habla de las nuevas formas de arte.

En esta época aparece el término subliteratura y os preguntaréis ¿qué es? Pues bien, la subliteratura es aquella literatura que se empieza a crear como producto de marketing y cuya intención es, principalmente, comercial. Sólo pensaban en lo que les podía gustar a la gente para así vender más y ganar dinero. Por todo esto, este término es peyorativo ya que no busca crear algo artístico que entretenga al público sino puro marketing.
Pero surge un problema, y es que se mete en el saco a muchos autores cuya única intención era la de crear arte. Así que para evitar que esto pasara, se crea el término BEST SELLER para analizar quién de ellos escribe por puro marketing y quién lo hace para crear arte y entretener al público.

Después de esta pequeña introducción vamos a meternos de lleno en la LITERATURA INFANTIL, que comprende hasta los 12-14 años dependiendo de la evolución del niño y de las editoriales.
Es una literatura de género y va destinada a un público concreto, por lo tanto, es una literatura de receptor implícito. También refleja los momentos evolutivos por los que pasan los niños, por ejemplo, si se encuentran en la etapa de socialización el libro ideal sería uno de pandillas.

Aunque nos resulte difícil de creer, la historia de la literatura infantil es inexistente hasta finales del S.XVIII y no se piensa en los niños como receptores implícitos de nada. También es verdad que por esa época muy pocos sabían leer, solamente sacerdotes, curas, monjas y algunos hijos de nobles.

En el Siglo de las Luces comienzan a crearse las escuelas en todo el mundo e incluso los niños pobres acuden a ellas.
Los niños aprendían a leer a los 10 años y los libros que leían eran historias sagradas y vidas de santos. La lectura era una instrucción muy poco empleada en el tiempo libre y sólo con el objetivo de formarse.
Aparecieron unos personajillos llamados juglares y con ellos los ciudadanos del pueblo escuchaban todo, no se censuraba nada. Los niños estaban allí por lo que en esa época sabían y veían todo.
La vida de los niños por aquel entonces era muy dura ya que a partir de los 6-7 años ya eran adultos y se ponían a trabajar o a ayudar a sus padres y, por supuesto, leían lo mismo que leían sus padres.

Las primeras manifestaciones literarias del S.XVIII no eran para niños ya que los menores de 7 años no entendían, entonces ¿para qué escribir para ellos, verdad?
Por el contrario, sí que comenzaron las primeras literaturas juveniles cuyo exponente más claro fue Julio Verne, que escribe sobre todo libros de aventuras y de ciencia ficción. Una obra importante de Julio Verne es “Los tres mosqueteros”, la cual fue inspirada por Alejandro Dumas.




¡¡Hasta pronto!!

domingo, 6 de marzo de 2011

El bibliobús: nuestra biblioteca de aula


Cada día estoy más convencida de que los cuentos son algo maravilloso, sobre todo para los más pequeños; y este artículo me lo ha confirmado una vez más.

El bibliobús es una biblioteca “andante” que va viajando por diferentes lugares para que todos podamos disfrutar de los libros que ofrece. La escuela de la que habla el artículo ha hecho socios a todos sus alumnos. De esta forma, tanto pequeños como mayores, podrán coger cuentos y libros del bibliobús para poder trabajar las Unidades Didácticas pero también para divertirse y desarrollar sus emociones.

Algunas  de las ventajas que ofrece el bibliobús son que el gasto en libros es prácticamente nulo  y que tienen a su disposición un “cuentacuentos”.
Algo fundamental en esta experiencia es: "Los alumnos a través de los cuentos van a poner en práctica todas esas habilidades que están aprendiendo o ya dominan y que son fundamentales para enfrentarse al aprendizaje de la lectura y de la escritura; habilidades que trabajamos y desarrollamos en cualquier Unidad Didáctica."

Esta escuela no solo pretende que los niños lean cuentos sino que también desarrollen su expresión corporal, la manipulación y el lenguaje oral. Para conseguirlo, el niño dramatiza los diferentes personajes, se mueve con ellos, interactúa en el medio en el que se desarrolla la historia, etc. También el niño se expresa evocando los relatos de los hechos que se suceden en el cuento.

Existen dos momentos determinantes para trabajar con los cuentos: el inicio de la jornada y la “tarde de los cuentos”. Sin embargo, no debemos olvidar los momentos libres del alumno, en el que él decide la actividad que quiere realizar. En el caso de Educación Infantil, los niños eligen en que rincón quieren trabajar. Este es el momento en el que el niño puede escoger estar en el rincón de lectura (biblioteca de aula). El niño elige el cuento que quiere leer y si prefiere hacerlo solo o acompañado de algún compañero de clase.

Como conclusión, los cuentos y los libros son muy importantes para el desarrollo y el aprendizaje del alumno, y la maestra debe crear las condiciones necesarias para que esto se produzca.